Los cangrejos de río autóctonos de la Península se dividen en dos grupos genéticos diferentes
Investigadoras del departamento de Genética de la Universidad Complutense de Madrid han realizado un estudio genético del cangrejo de río autóctono (Austropotamobius pallipes) donde ponen de manifiesto la división en dos grupos genéticos en la Península Ibérica. Este trabajo, entre otros, será presentado y discutido en el próximo Congreso Internacional de la Sociedad Internacional de Astacologia que tiene lugar en el Real Jardín Botánico de Madrid entre los días 5 y 8 de septiembre.
El estudio de ADN de 240 cangrejos de río de la Península Ibérica revela que su presencia en nuestros ríos se remonta entre 25.000 y 50.000 años atrás y que existen dos grupos genéticos diferenciados, uno en la zona norte y otro en el centro.
Las científicas obtuvieron 240 cangrejos de las cuencas de los principales ríos españoles y diez crustáceos del río Arno (Italia), como referencia externa, para averiguar si existen lazos genéticos entre las poblaciones de ambos países. El ADN se extrajo de unas pinzas (que los cangrejos regeneran) y, una vez conseguido, fueron devueltos vivos a sus ríos de origen.
A diferencia de otros estudios previos, en los que se analizaba un único marcador molecular, esta vez se han estudiado dos situados en el genoma mitocondrial -un fragmento del gen que codifica la proteína citocromo oxidasa subunidad I y el RNA ribosomal 16S -.
Al grupo del norte se han identificado a su vez las poblaciones de los Montes Vascos y las de la Cordillera Cantábrica, y en el grupo del centro, las poblaciones de la cuenca del Ebro se distinguen del resto.
El trabajo también pone de manifiesto que la mayoría de las poblaciones ibéricas tienen un tamaño pequeño y son consanguíneas. Es importante mantener la protección de la especie (el cangrejo de río autóctono está incluido dentro del Catálogo Español de Especies Amenazadas) ya que sólo quedan mil pequeñas poblaciones en la Península.