Técnicos del Consorci de l’Estany rescatan los renacuajos de anfibios del "Clot d'Espolla"

Rescate en Espolla
Otro momento del rescate
Liberación de renacuajos en la Llémena
Otro momento de la suelta
Análisis de patologías en Espolla. Foto: DanielFG
11/07/2017

- El rescate se realizó en la laguna de Espolla el 12 de abril, un día antes de que se secara completamente - Las larvas de anfibios rescatadas han sido liberadas en las lagunas de Can Morgat de Porqueres y en el río Llémena en el marco del proyecto LIFE Potamo Fauna - Esta actuación se ha realizado cumpliendo con un protocolo de actuación para evitar la proliferación de enfermedades de anfibios y con las autorizaciones correspondientes del Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Catalunya y con la colaboración del Grupo de Investigación de la Escuela de la Naturaleza del Ayuntamiento de Parets del Vallès

El "Clot d'Espolla" es una laguna de aguas temporáneas situada en los municipios de Fontcoberta y Porqueres en el Pla de l'Estany que forma parte del Espacio de Interés Natural del Lago de Banyoles y la Red Natura 2000. Se llena a partir de aguas subterráneas después de lluvias intensas que alimentan el acuífero de la zona lacustre del lago de Banyoles. Una vez lleno, en él crían especies acuáticas muy interesantes y protegidas, como un crustáceo antiguo llamado Triops cancriformis y algunas especies de anfibios. El día 13 de febrero de 2017 después de dos días de lluvias intensas se llenó la laguna de Espolla después de 3 años y medio sin hacerlo y la inundación duró dos meses. En este periodo se reprodujeron en la laguna hasta cinco especies de anfibios: el sapo corredor, el sapillo moteado, la rana pintada, el sapo de espuelas y el sapo partero común, y además se detectaron adultos de rana verde y ranita meridional.

En previsión del secado total de la laguna en pocas semanas y la numerosa presencia de renacuajos, especialmente de sapo de espuelas, una especie protegida, muy escasa y que necesita inundaciones largas para terminar su metamorfosis, se decidió organizar un rescate. El secado prematuro de la laguna habría provocado la muerte irremediable de los renacuajos, la mayoría de los cuales no habrían terminado su proceso de metamorfosis. A pesar de que esto es un hecho natural, la situación crítica de los anfibios aconseja realizar actuaciones de conservación como ésta y mover los renacuajos rescatados a otras zonas donde puedan desarrollarse completamente. Las poblaciones de sapo de espuelas se encuentran en regresión y en una situación de conservación muy preocupante en las comarcas gerundenses. Sus localidades son aisladas y con pocos individuos.

El 12 de abril cuando sólo había 20 cm. de agua en la laguna se llevó a cabo el rescate por parte de cuatro operarios del Consorci de l’Estany. Se capturaron unos 60.000 ejemplares de renacuajos, especialmente de sapillo moteado, pero también de sapo de espuelas. La proporción era de un 80-85% sapillo moteado (Pelodytes punctatus), 10-15% sapo de espuelas (Pelobates cultripes) y un 0-1% otros, como el sapo partero común (Alytes obstetricans). Los ejemplares de Triops cancriformis localizados, fueron separados de los renacuajos y devueltos a la laguna. También se observaron algunos ejemplares juveniles (pequeñas ranitas) que ya habían salido del agua, que no se recogieron.

A nivel general los anfibios están sufriendo una regresión por la pérdida de puntos de cría, la destrucción de zonas húmedas, los efectos del cambio climático, el efecto de las especies exóticas y la aparición de nuevas enfermedades como el ranavirus o la quitridimidiosi. Para evitar la propagación de enfermedades infecciosas que están causando efectos negativos sobre las poblaciones de anfibios se realizó un estudio previo del estado de salud de los renacuajos. Expertos del Grupo de investigación de la Escuela de Naturaleza de Parets del Vallès realizaron un análisis de las patologías de los renacuajos de Espolla previamente al rescate para descartar la presencia de ranavirus y quitridimidiosi. El análisis se hace a través de un estudio genético, técnica del PCR, que se realiza en Alemania. Los resultados fueron negativos, dando el visto bueno para realizar la translocación de ejemplares a las nuevas localidades.

El ranavirus es un patógeno en forma de virus que provoca síndromes ulcerosos y hemorrágicos, dermatitis y pequeñas hemorragias multifocales que afectan al tejido subcutáneo de la superficie plantar de los pies de los anfibios. En cuanto a la quitridimidiosi es una enfermedad infecciosa de los anfibios, provocada por el hongo quitridio Batrachochytrium dendrobatidis. No existe ninguna medida eficiente para controlar la enfermedad en poblaciones salvajes. La enfermedad está contribuyendo a un declive en las poblaciones de anfibios a escala global, un declive que parece haber afectado el 30% de las especies de anfibios del mundo. Por ello, es vital antes de hacer ninguna liberación en una nueva localidad asegurarse de que los individuos a translocar no son portadores.

Los ejemplares rescatados han sido liberados en las lagunas de Can Morgat de Porqueres cerca del Lago de Banyoles y en unas charcas de nueva creación en el entorno del río Llémena cerca de su desembocadura. Las charcas han sido creadas por el Consorci del Ter en el marco del proyecto LIFE Potamo Fauna (www.lifepotamofauna.org) y la liberación de anfibios también forma parte de las actuaciones para mejorar las poblaciones de anfibios en el río Ter y la Llémena.

La actuación ha sido autorizada por el Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Catalunya y los agentes rurales han levantado acta de la actuación participando en su supervisión y coordinación.

 

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